¿Qué hay que estudiar para ser notario en España?
Si te preguntas qué hay que estudiar para ser notario, aquí vamos a explicarlo de manera sencilla y sin rodeos. Hablaremos juntos del camino a seguir, desde estudiar Derecho hasta presentarse a la oposición, con pasos claros, ejemplos prácticos y consejos útiles. La idea es darte una guía cercana, fácil de entender y que te ayude a organizarte sin complicaciones. Y si todavía estás dudando entre las salidas de distintas profesiones, este artículo puede serte una buena orientación.
1¿Cómo ser notario?
1) El Grado en Derecho
Para ser notario, lo primero es estudiar un Grado en Derecho. Durante la carrera aprenderás materias como civil, mercantil, hipotecario, fiscal o procesal, que más tarde serán la base de la oposición. Además, este mismo grado es el que habilita para iniciar el acceso a la abogacía, un requisito esencial para quienes deciden ejercer como abogados, aunque en el caso de la notaría el camino es distinto, pues se centra en la superación de una oposición específica.
Y si quieres tener una visión más amplia, siempre viene bien echar un vistazo a las salidas de derecho, para entender mejor dónde encaja la notaría dentro de todas las opciones legales que existen. También es interesante considerar la flexibilidad que ofrece una universidad online, que puede facilitar compaginar estudios con la preparación de la oposición.
2) La oposición
Quienes se plantean qué estudiar para ser notario descubren pronto que la oposición es dura y requiere mucha constancia. No solo se trata de memorizar, también hay que aprender a hablar en público, a redactar con claridad y a mantener la calma ante un tribunal. En total, hay cuatro ejercicios que suelen repetirse cada año:
- Primer ejercicio (oral): derecho civil y mercantil.
- Segundo ejercicio (oral): hipotecario, fiscal y procesal.
- Tercer ejercicio (escrito): dictamen práctico.
- Cuarto ejercicio (práctico): redacción de escrituras y resolución de supuestos.
2¿Qué contenido estudiar en profundidad?
Bloques esenciales del temario
Cuando pensamos en cómo ser notario en España, lo más práctico es dividir el temario en los bloques que más vas a usar en el día a día dentro de una notaría:
- Derecho civil: negocios jurídicos, contratos, familia, sucesiones.
- Derecho mercantil: sociedades, títulos valores, concursos.
- Derecho hipotecario: sistema registral, garantías reales, publicidad registral.
- Fiscalidad: ITPAJD, ISD, IVA y su interacción con documentos notariales.
- Procesal: nociones necesarias para la práctica y el dictamen.
Habilidades transversales que marcan la diferencia
Además del temario, es muy recomendable trabajar tres competencias clave que, en la práctica, separan a quienes aprueban. Al final, no todo es saberse los artículos de memoria, ya que también influyen la forma en la que nos expresamos, cómo organizamos el tiempo y la confianza con la que afrontamos cada examen:
- Oratoria y memoria: clave en los dos exámenes orales. Una buena opción sería ensayar exámenes simulados cada semana.
- Redacción jurídica y precisión técnica: esencial para el dictamen y la escritura.
- Gestión del tiempo: planificar ciclos de repaso, por ejemplo entre 8 y 10 semanas y medir progreso.

3Plan de estudio
Calendario orientativo (24–36 meses)
- Meses 0–6: base sólida en civil y mercantil, y primeras vueltas a hipotecario.
- Meses 6–12: introducción sistemática de fiscal y procesal, y simulacros orales mensuales.
- Meses 12–18: consolidación de orales y primeros dictámenes semanales.
- Meses 18–24: vuelta completa al temario y simulacros quincenales de todos los ejercicios.
- Meses 24–36: ajuste, rotación de temas débiles y práctica intensiva de escrituras.
Este plan puede ir acompañado de formación extra, como másteres o cursos, que te ayuden a reforzar temas de ética y tecnología. Si te llama la atención cómo se mezclan el derecho y la tecnología en nuestro día a día, te puede interesar echar un vistazo a las salidas de ética digital, donde conocerás cómo se relaciona todo esto con el trabajo notarial en un mundo cada vez más digital.
Método de trabajo semanal
- Horas: entre 25 y 40 semanales según etapa.
- Técnicas: fichas de recordatorio, mapas mentales y repasos espaciados.
- Simulacros: cronómetro y rúbricas objetivas para medir la mejora.
4Requisitos y salidas profesionales
Para que no haya dudas sobre cómo ser notario, conviene resumir los requisitos comunes. Y así, de un vistazo rápido, sabrás qué necesitas tener en cuenta antes de dar el primer paso:
- Nacionalidad española o de la UE.
- Titulación: Licenciatura o Grado en Derecho.
- Superación de la oposición en los términos que indican las bases publicadas en el BOE.
Al aprobar la oposición, entramos en un trabajo estable y con mucha importancia práctica. Aun así, dentro del mundo del derecho hay más caminos posibles. Si queremos comparar opciones, podemos ver qué diferencia hay entre un abogado y un procurador o repasar los tipos de abogados que existen. De esta manera, entenderás mejor en qué lugar se sitúa la notaría y así, tener claro qué otras alternativas podríamos valorar en el futuro.
5Consejos prácticos para preparar la oposición de notario
Elección de preparador y materiales
- Busca preparadores con experiencia contrastada y sesiones semanales con feedback individual.
- Alterna manuales, legislación actualizada y jurisprudencia.
- Apóyate en tablas comparativas y esquemas para materias densas, sobre todo para hipotecario y fiscal.
Simulacros y métricas
- Registra tiempos por cada tema y notas de cada simulacro oral.
- Repite dictámenes con variaciones y compara con otros modelos.
- Cierra cada mes con un informe personal: avances, puntos de bloqueo y plan de acción.
Bienestar y constancia
- Programa descansos y actividad física ligera.
- Establece rituales de inicio, repasando puntos clave del día anterior, y de cierre siempre con una revisión breve.
- Ten siempre a mano calendarios en bloque, alertas y checklists.
En definitiva, lo que hay que estudiar para ser notario se resume en tener el Grado en Derecho y preparar con constancia una oposición exigente. Si te lo planteas en serio, ya sabes qué pasos seguir y solo queda ponerle esfuerzo y paciencia para llegar a la meta.